jueves, 22 de octubre de 2009

Prestaciones sociales y sanitarias: "ventanilla única"

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Dinars a Casa de Convalecencia” es un foro que organiza la Fundació Josep Laporte periódicamente y que permite el abordaje de problemas sanitarios desde diversos ángulos. Ayer asistí a una conferencia de la Consejera del Departament d’Acció Social i Ciutadania, de la Generalitat de Catalunya, la Sra. Carme Capdevila.

El impacto de los problemas sociales en la organización de las prestaciones sanitarias es bien conocido. Huelgan los ejemplos. El envejecimiento y las enfermedades crónicas, con el denominador común de la dependencia, dibujan una línea difusa entre los servicios sociales y los servicios sanitarios. Los pacientes ingresados en centros residenciales tienen problemas sanitarios que, quizás no son muy distintos a los que tienen los pacientes ingresados en centros sanitarios de larga estancia. La Consejera defiende estos principios:
  • Existe una fina membrana entre los dispositivos sanitarios y los dispositivos de prestaciones sociales.
  • Desde el punto de vista del ciudadano debe existir una “ventanilla única” para acceder a la valoración y a la indicación de las prestaciones necesarias.
  • El sistema sanitario está mucho más desarrollado que el sistema de prestaciones sociales (la Ley general de Sanidad es de 1986, mientras que la regulación de las prestaciones sociales tiene poco más de dos años).
  • El sistema sanitario tiene un peso económico y más capacidad organizativa y de respuesta asistencial que el dispositivo social.
  • En estos momentos, la unión de ambos dispositivos (sanitario y de prestaciones sociales) representaría la dilución de los dispositivos de prestaciones sociales (y su desaparición) en el seno de los dispositivos sanitarios.

    PRODEP, el programa promoción de la autonomía personal y la protección a las personas en situación de dependencia, quiere ser un medio de vincular los servicios sociales con los sanitarios. Pero, todavía, no llega a ser la ventanilla única.

    La Consejera sugiere un horizonte de cinco años para conseguir la ventanilla única.

    Nota: podemos discutir hasta la saciedad la mejor estrategia para conseguir la “ventanilla única”, pero no hay que olvidar que las prestaciones sociales hay que financiarlas y que el país es el que es (me refiero a que el país tiene el producto interior bruto que tiene, semejante al de Israel o Eslovenia). Más prestaciones quizás requieren, entre otras cosas, aumentar la productividad global del país.

2 comentarios:

de la Loma dijo...

Este debate lo he vivido casi desde el inicio de mi vida profesional... ahora esta descentralizado, pero tengo la sensacion de que hay pocos avances reales. Me pregunto si hay voluntad politica real de poner medios en ello.... o.. tal vez los "provocadores sociales" deberian llevar este tema a primera plana... lo mismo que se la creado un ministerio de igualdad.....

Joan Escarrabill dijo...

Estoy totalmente de acuerdo, este es un tema pendiente. Pero hay que pensar en el PIB...